La vieja
Mujer, charrúa, porfiada a mas no poder y ensañada en esa porfía en defender con uñas y dientes la memoria de los que están de vuelta en el camino que da vueltas, el camino de los que caminan las estrellas y los que aún están aquí. Una suerte de paladín de la justicia que estalla en furia y ternura al mismo tiempo ante la ofensa, (a drede o no), de parte de lo que ella considera su clan, su grupo, su familia….
País, isla, territorio de dualidades irreconciliables conciliadas, mezcla de partes que constituyeron al origen del cosmos, o al resurgimiento del mismo en el espiral de los tiempos.
Llegaste al mundo indígena por cosas del destino, de la casualidad, si es que existe, (en realidad no existe), las tramas de la vida te fueron juntando, las fueron juntando, y formaron una dupla de esas que no se separan ante nada…. y así fue, ni la muerte lo ha conseguido, después de todo, la muerte es un cuento de los que no conocen el camino recorrido por nuestro pueblo, y hoy, tiene el agrado de compartir, junto con muy pocos inchalas, la preciada responsabilidad de cargar la memoria de la werken, marchando adelante en el camino que marca nuestro destino.
Frágil, distante, incomprensible, tierna, y a la vez lo opuesto, no vacila en llevar adelante acciones que repercutirán negativamente en sus vínculos personales (o no), si ello está dentro de las normas que juró a si misma y a su hermana del alma y el corazón defender.
Vida que pocos pueden hacer alarde de haber vivido, para bien o mal, después de todo, eso es tan sólo parte de su realidad, de opuestos que se complementan, fuente de aprendizaje continuo, vida vivida a flor de piel, búsqueda continua de una felicidad que llega y se va, prolongación, supervivencia….
A los que la conocen, valórenla, no busquen comprenderla, no podrán hacerlo, está mas allá de ello. No busquen la respuesta en la acción, sino en el motivo que inspira a ésta, descubrirán que en el fondo, está el amor por el pueblo que nos enorgullece, canixiguat ten. Podrán odiarte, amarte, admirarte o negar tu existencia, pero si hay algo que te hace uno con la werken, es el ser imposible de ser pasada por alto en el lugar o el momento que sea, tu clan, aunque sea de uno, te sigue y te seguirá hasta el destino que depara a nuestro pueblo, el pueblo charrúa aunado en la lucha con todos los hermanos del camino. Desde donde la bilú guidaí se complementa con el poderoso sobá, tus hermanos, nuestros hermanos nos observan, cuando partas al camino de las estrellas te estarán esperando colmados de orgullo al igual que los que te dejamos partir, en un otoño de nuestro corazón, que espero sea dentro de muchos veranos por venir. Mi mano en tu corazón, oh valiente y admirable cacique Huebilú…. Yamandú.
-- Los Pueblos Originarios decimos hace milenios: .... "somos las diferentes caras de una misma alquimia" ........ con el espíritu del águila, junto al espíritu del cóndor, que mi espíritu vuele por el cosmos en busca del conocimiento y la verdad .... Huebilú.
Mujer, charrúa, porfiada a mas no poder y ensañada en esa porfía en defender con uñas y dientes la memoria de los que están de vuelta en el camino que da vueltas, el camino de los que caminan las estrellas y los que aún están aquí. Una suerte de paladín de la justicia que estalla en furia y ternura al mismo tiempo ante la ofensa, (a drede o no), de parte de lo que ella considera su clan, su grupo, su familia….
País, isla, territorio de dualidades irreconciliables conciliadas, mezcla de partes que constituyeron al origen del cosmos, o al resurgimiento del mismo en el espiral de los tiempos.
Llegaste al mundo indígena por cosas del destino, de la casualidad, si es que existe, (en realidad no existe), las tramas de la vida te fueron juntando, las fueron juntando, y formaron una dupla de esas que no se separan ante nada…. y así fue, ni la muerte lo ha conseguido, después de todo, la muerte es un cuento de los que no conocen el camino recorrido por nuestro pueblo, y hoy, tiene el agrado de compartir, junto con muy pocos inchalas, la preciada responsabilidad de cargar la memoria de la werken, marchando adelante en el camino que marca nuestro destino.
Frágil, distante, incomprensible, tierna, y a la vez lo opuesto, no vacila en llevar adelante acciones que repercutirán negativamente en sus vínculos personales (o no), si ello está dentro de las normas que juró a si misma y a su hermana del alma y el corazón defender.
Vida que pocos pueden hacer alarde de haber vivido, para bien o mal, después de todo, eso es tan sólo parte de su realidad, de opuestos que se complementan, fuente de aprendizaje continuo, vida vivida a flor de piel, búsqueda continua de una felicidad que llega y se va, prolongación, supervivencia….
A los que la conocen, valórenla, no busquen comprenderla, no podrán hacerlo, está mas allá de ello. No busquen la respuesta en la acción, sino en el motivo que inspira a ésta, descubrirán que en el fondo, está el amor por el pueblo que nos enorgullece, canixiguat ten. Podrán odiarte, amarte, admirarte o negar tu existencia, pero si hay algo que te hace uno con la werken, es el ser imposible de ser pasada por alto en el lugar o el momento que sea, tu clan, aunque sea de uno, te sigue y te seguirá hasta el destino que depara a nuestro pueblo, el pueblo charrúa aunado en la lucha con todos los hermanos del camino. Desde donde la bilú guidaí se complementa con el poderoso sobá, tus hermanos, nuestros hermanos nos observan, cuando partas al camino de las estrellas te estarán esperando colmados de orgullo al igual que los que te dejamos partir, en un otoño de nuestro corazón, que espero sea dentro de muchos veranos por venir. Mi mano en tu corazón, oh valiente y admirable cacique Huebilú…. Yamandú.
-- Los Pueblos Originarios decimos hace milenios: .... "somos las diferentes caras de una misma alquimia" ........ con el espíritu del águila, junto al espíritu del cóndor, que mi espíritu vuele por el cosmos en busca del conocimiento y la verdad .... Huebilú.
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